Redacción Youtopía
La sostenibilidad en la producción del mango tiene varios retos que se enfocan en lograr una mejor productividad en los cultivos.
Uno de los aspectos que se analiza en el contexto del cambio climático tiene que ver con el futuro del agua de riego y su incidencia en la producción de la fruta.
“Definitivamente el cambio climático nos afecta. Ahora no se sabe cuando va a llover y cuando no va a llover. Obviamente, la técnica más manejable es utilizar sistemas de riego; sin embargo, algo fundamental que ayuda significativamente es la materia orgánica”.
Así lo señala el investigador costarricense Bernier Coto, quien participó en la II Semana Internacional del Mango Ecuatoriano, organizada por la Fundación Mango Ecuador, del 5 al 9 de septiembre de 2022.
Coto también menciona que incrementar en 1% el contenido de materia orgánica, “parece fácil pero no lo es”, ayuda a contener hasta 10 000 litros de agua en una hectárea.
“Se puede minimizar el estrés hídrico y favorecer los sistemas de irrigación aumentando la incorporación de materia orgánica en los terrenos. El uso de materia orgánica es la mejor manera de retener humedad en los cultivos”, señala el especialista.
El cambio climático y su mayor incidencia en los cultivos
Bernardo Malo, presidente del Directorio de la Fundación Mango del Ecuador, señaló en la inauguración de la Segunda Semana Internacional, que el país al igual que otras naciones productoras cuentan con una serie de desafíos relacionados con la producción de la fruta.
De allí que Iñaki Hormaza, investigador español, sostiene que el cambio climático no solo va a incidir en el futuro del mango sino en el de otros cultivos.
“Los mayores períodos de sequía, problemas de temperaturas más extremas en el verano e invierno, son cambios rápidos a los que hay que adaptarse”, señala Hormaza.
Consecuentemente, el cambio climático en relación con la productividad ocasiona una baja producción en los cultivos, da paso a la presencia de nuevas plagas y enfermedades, y se generan impactos en la rentabilidad y competitividad de la fruta.
La adaptación de las necesidades, gustos y preferencias del consumidor
A esta industria le interesa desarrollar una producción sostenible y de esta manera, atender mejor a las necesidades del consumidor.
Así lo explica el especialista Manuel Michel de la organización The National Mango Board (NMB).
Durante la pandemia, la demanda de la fruta se incrementó, principalmente en el mercado norteamericano. La fruta ya se encuentra entre las 10 de mayor consumo en Estados Unidos.
Además de atender las necesidades en cuanto a volumen, lo importante es ofrecer variedades con mejores características. Actualmente se ofertan las variedades Tommy Atkins, Kent, Ataulfo y Keitt.
“Por ello se apoyan investigaciones que identifican marcadores dentro del mapa genoma del mango, para acelerar el proceso de desarrollar nuevas variedades con mejores características”, dice Michel.
Las cifras de exportación de mango ecuatoriano
La primera semana de septiembre de este año, Ecuador comenzó la exportación de mango.
De acuerdo con la Fundación Mango Ecuador, a inicios de este mes salieron 19 634 cajas con destino al mercado de Estados Unidos.
Hasta el 2021, Ecuador se constituyó en el cuarto mayor exportador de la fruta hacia ese país, después de México, Perú y Brasil, según datos de The National Mango Board.
El monto exportado alcanzó los USD 76,1 millones, en ese período. En 2020 fueron USD 66,2 millones.