Redacción Youtopía
El Acuerdo de Escazú es el primer tratado ambiental de la región y del mundo, que incluye disposiciones que protegen a las personas defensoras de los derechos humanos en asuntos ambientales.
Ese documento reconoce el derecho de las personas, en forma individual o colectiva, a buscar, recibir o difundir información veraz y oportuna de los acontecimientos y procesos de interés general.
El 21 de mayo de 2020, Ecuador se convirtió en el noveno país en ratificarlo.
Para la Cancillería, esa ratificación «fortalece el reconocimiento constitucional del derecho de la ciudadanía a vivir en un ambiente sano y ecológicamente equilibrado, que garantice la sostenibilidad«.
Los avances de su implementación se presentaron este 9 de agosto de 2022.
La difusión estuvo a cargo del Ministerio de Ambiente, Agua y Transición Ecológica (Maate), junto con la Universidad Hemisferios (UHE) y el apoyo de la Cooperación Alemana GIZ.
Los pilares fundamentales del Acuerdo
El Acuerdo de Escazú tiene tres pilares fundamentales: acceso a la información, participación ciudadana y acceso a la justicia en temas ambientales.
El objetivo es promover el diseño de políticas públicas equilibradas y, sobre todo, atenidas a los requerimientos de participación ciudadana y garantía de los derechos en la región.
“Solo el liderazgo, colectivo, creativo y determinado nos llevará al cumplimiento de los objetivos y metas de todos los acuerdos ambientales”, señaló Alegría Corral, delegada del Ministerio. “Y, lo que es más importante, a la protección real de nuestro planeta”.
La aplicación del Acuerdo en Ecuador
Ecuador plantea en su Primer Plan de Gobierno Abierto 2019-2022, el compromiso relativo a la “Implementación de los Derechos de Participación y Acceso a la Información Ambiental”.
Por ahora se han registrado avances en el diagnóstico de congruencia del Acuerdo de Escazú, con el marco político, normativo e institucional vigente.
También se impulsa la participación de organizaciones de la sociedad civil, academia y movimientos locales que promueven el Acuerdo, en una Plataforma u Observatorio Ambiental.
En los avances se destaca la presentación de propuestas y la definición de una hoja de ruta para avanzar en el proceso de implementación de las disposiciones del compromiso regional.
En este sentido, Ecuador ha impulsado su proceso de implementación con apoyo y participación de la sociedad civil, la academia y la Cooperación Alemana GIZ, a través de su Programa Ecuador SinCero.
Por ahora se han establecido propuestas y alternativas de reformas a la normativa secundaria, a las políticas públicas y políticas institucionales que serían necesarias realizar para armonizar los estándares que plantea el Acuerdo.
