Redacción Youtopía
La industria minera en el mundo se enfrenta a un doble reto en la actualidad.
Primero, reducir su huella ambiental y social a gran escala. Segundo, producir más, sobre todo minerales estratégicos (como el cobre), para la transición energética.
Los objetivos sostenibles para la minería se orientan a desarrollar los recursos minerales que maximicen los beneficios económicos y minimicen los impactos ambientales.
La tecnología es aliada clave para una industria minera sostenible y responsable.
El desarrollo e innovación permite contar con equipos que miden parámetros relacionados con el control de las emisiones atmosféricas, así como la calidad del agua y la calidad del aire.
Marcos Calderón, gerente de Datamine, en el contexto de la feria Expominas que se realizó en Quito del 24 al 26 de agosto, destacó la importancia del buen uso de los datos.
“El manejo de los datos es fundamental, sobre todo para tener un mejor enfoque de sostenibilidad”, dijo. “La mejor identificación de minas y yacimientos, con un buen uso de la data, también minimiza el impacto ambiental en los procesos de exploración y explotación”.
El uso de los minerales en la transición sostenible
Los precios de los metales industriales, fundamentales para la economía mundial, ya han registrado un importante repunte pospandémico conforme se han ido reabriendo las economías.
Así lo dice un estudio publicado por el Fondo Monetario Internacional (FMI), en el que se advierte que la escalada de precios de los metales puede retardar la transición energética.
Por ejemplo, el precio del litio, que se usa para las baterías de los vehículos eléctricos, podría subir de su nivel de 2020 de unos USD 6.000 por tonelada métrica ™ a casi USD 15.000 por TM a finales de esta década.
Los precios del cobalto y el níquel también registrarían alzas similares en los próximos años.
El rápido ritmo de cambio necesario para cumplir con las metas climáticas.
En el escenario de amplio alcance de la Asociación Internacional de Energía (AIE), el consumo de litio y cobalto tiene que aumentar más de seis veces para cubrir las necesidades de las baterías y otros usos de energía limpia.
El uso del cobre se duplicaría y el del níquel se cuadriplicaría, aunque esto contempla necesidades no relacionadas con la energía limpia.
Nuevos proyectos que entrarán en operaciones en Ecuador
Tres nuevos proyectos tienen previsto ingresar en la industria minera a gran escala en Ecuador.
Se trata de Curipamba, La Plata y Loma Larga, ubicados en las provincias de Bolívar, Cotopaxi y Azuay, respectivamente.
La inversión estimada alcanza los USD 800 millones, que se destinarán para la construcción de las minas y cuyos contratos se espera firmar en este 2022.
A partir del 2023 se espera concretar el inicio de operaciones de otros proyectos como son Mirador del Norte, Ruta del Cobre, Cascabel y Warintza.
Andrew Taunton, vicepresidente de Solgold en Ecuador, dijo en Expominas que a través del proyecto Cascabel se busca reducir al máximo el impacto ambiental, para que se genera una producción más limpia.
De acuerdo con el Banco Central del Ecuador (BCE), en el primer semestre de este año, las exportaciones mineras alcanzaron los USD 1 457 millones.
Las previsiones del Ministerio de Energía y Minas apuntan a que este año, los ingresos por exportaciones de productos mineros superarán los USD 2 600 millones.